lunes, 14 de octubre de 2013

The green inferno (Eli Roth, 2013)


Conmocionado aun me encuentro tras el pase de THE GREEN INFERNO el pasado sábado en el festival de Sitges.
Acudí a dicho festival como cada año con mucho entusiasmo y la verdad es que las ganas de ver esta película eran muchas, así que después de pasar un poquito de frío y aguantar en la cola una hora de retraso por fin me disponía a ver dicho film a escasos metros de su director (Eli Roth) que no dejaba de reír y de observar al publico para ver sus reacciones cada vez que algún brazo o pierna eran mutilados, y su bella protagonista (Lorenza Izzo).

Lorenza Izzo y Eli Roth en la proyección de
THE GREEN INFERNO en el auditorio de Sitges.
La película arranca magistralmente con los verdes bosques de la amazonia peruana y una banda sonora que te aplasta el cráneo desde el minuto cero, de ahí pasamos a conocer a los personajes y sus circunstancias.

Cierto es que Eli Roth se recrea a mi gusto mucho/muchísimo en el inicio de la historia haciendo desesperar al espectador que quiere ver tripas y litros de sangre, pero teniendo en cuenta el resultado final merece la pena, así que después de convencer a la bella Justine (hija de un abogado de la ONU) de que debe salvar los bosques peruanos y a la tribu que allí habita y alistarse junto a un grupo de jóvenes activistas en dicha misión (como diría la baronesa Thyssen; NO A LA TALA!) emprenden viaje a Perú.

Allí Justine ya se da cuenta de que algunos de sus compañeros de "excursión" no son tan legales como ella creía y que la idea de viajar hasta allí podría no tener un final feliz, aunque es a la vuelta mientras celebran el éxito de su misión a bordo de una avioneta cuando esta sufre una avería y caen en su propio "infierno verde".


Tras caer en tan bello paraje los que no tienen la suerte de morir son capturados por los indígenas, es en ese instante cuando asistimos a uno de los momentos cinematográficos mas angustiantes que yo recuerde en los últimos tiempos viendo como los jóvenes son transportados, manoseados por la multitud hasta el poblado indígena.


Una vez allí es donde empieza la verdadera acción, donde Eli Roth se desenvuelve como pez en el agua y donde todos disfrutamos como niños.
Pese a parecer a priori una película atroz el director encuentra los momentos exactos para introducir la comedia (aunque yo sea de los que no les gusta en exceso esa mezcla de géneros he de reconocer que a parte de sufrir, sentir asco en ciertos momentos, también reí y algunos, que no yo, lo agradecen).


Que esta película bebe de cintas como HOLOCAUSTO CANIBAL (Ruggero Deodato, 1980) esta claro (quien no recuerda la caratula de esta película en el videoclub?) pero en ese sentido Eli va un paso mas allá y a parte de brindarnos esta carnicería humana hace una critica social al activismo pasivo que predomina hoy en día por culpa de las nuevas tecnologías donde los jóvenes se creen buenas personas por el mero hecho de hacer un retuit y creen que pueden salvar el mundo con su iPhone, también denuncia la manipulación que llevan a cabo algunas empresas explotadoras del Amazonas para sus propios intereses.

Personalmente los indígenas de esta tribu me dieron mucho miedito.


En cuanto a las interpretaciones, cabe destacar el trabajo de la protagonista que sufre de la mejor de las maneras y se postula seriamente a poder ser en un futuro una gran "scream queen" (para el que no la conozca como era mi caso también podéis verla en AFTERSHOCK (Nicolas Lopez, 2012).


Con ganas de disfrutarla de nuevo solo puedo recomendaros que corráis a verla en cuanto tengáis la oportunidad.

Lo mejor: Lorenza Izzo, la BSO, el momento de la captura.

Lo peor: Tarda en arrancar, un exceso de comicidad en momentos que no lo requiere.