domingo, 14 de diciembre de 2014

Ouija (Stiles White, 2014)



He aquí nos encontramos con la enésima adaptación que tiene como elemento principal el tablero de ouija (güija según la grafía recomendada por la Real Academia Española). La ouija es un juego de mesa de origen impreciso que se puso de moda en occidente a finales del sigo XIX y que supuestamente se utiliza para entablar contacto con los espíritus de los difuntos. Actualmente la marca de juguetes Hasbro la sigue comercializando con éxito en los EE.UU  y Canadá. 


Todo empieza cuando Debbie Galardi (Shelley Hennig) encuentra un tablero ouija en la buhardilla de su casa y decide contactar con el mas allá, en ese momento empezaran a sucederse fenómenos extraños lo que hará que la chica se aparte de sus amigos y acabe con su vida en un aparente suicidio. 
La verdad es que el opening de OUIJA no esta nada mal, inquieta y asusta por partes iguales y deja al espectador con ganas de mas, aunque según avanza el metraje la tensión se va diluyendo hasta convertirse en una cinta del montón.


Tras el primer e impactante acto conocemos al resto de protagonistas (amigos de Debbie) entre los que destaca la presencia de Olivia Cooke, quizás el rostro mas conocido gracias a su participación en la televisiva BATES MOTEL. A nivel interpretativo podríamos decir que ninguno aprueba con nota, especialmente los chicos que resultan inverosímiles en sus interpretaciones.
Tras investigar lo ocurrido y encontrar la ouija, el grupo de jóvenes decide utilizarla para contactar con su amiga recién fallecida, con la mala suerte de que despertaran a otro espíritu con muy mala baba. Uno a uno serán asediados por dicho espíritu hasta acabar con sus vidas.


Cabe destacar la presencia de la veterana actriz Lin Shaye (INSIDIOUS, INSIDIOUS; CHAPTER II) que aunque en un breve papel, ilumina la película en las escenas que aparece.
Aunque la trama -totalmente llamativa para los amantes del genero- es mas que aceptable, el director resuelve las escenas importantes de manera precipitada sin llegar a dar a los espectadores lo que buscan. Aun así estamos ante una película de fácil consumo que se deja ver sin mas pretensiones que el puro entretenimiento, a la espera de recibir algún que otro susto.



El director resuelve el tercer y ultimo acto del mismo modo que el resto de escenas importantes de la película, de una manera acelerada y con prisas por mostrarnos los créditos finales.
Aun así y pese a cualquier critica, hay que reconocerle al estudio y al director el acierto al rodar esta cinta que se ha convertido en todo un éxito, en nuestro país ha recaudado el primer fin de semana 1.168.000 euros, convirtiéndose en el mejor estreno de un titulo de terror de todo el año, superando a ANNABELLE.
Que anuncien una segunda parte es cuestión de tiempo.


Lo mejor: El opening, Lin Shaye y la escena que protagoniza Isabelle (Bianca Santos) en el baño.

Lo peor: Que el director no se haya esmerado un poco mas en crear un climax de terror que al fin y al cabo es de lo que se trata y consiga con ello que algunas de las escenas mas importantes del film pasen sin pena ni gloria.